La globalización ofrece a los negocios de todos los tamaños beneficios operacionales y oportunidades de expansión, pero también puede ser fuente de nuevos y diversos tipos de riesgo. Los desastres ambientales de origen humano están en el top 10 de riesgos globales en términos de probabilidades e impacto, según el informe World Economic Forum’s Global Risks Report 2019. Por eso, hoy es más importante que nunca tomar los pasos correctos para evaluar los riesgos ambientales de tu compañía y establecer un programa de seguros a su medida, que permita minimizar el impacto de la polución y el daño medioambiental.
Dependiendo de la naturaleza y el alcance geográfico de tu negocio, administrar el riesgo medioambiental puede ser una tarea altamente compleja. Para ayudarte a evaluar y fortalecer tus seguros en esta área, debes comenzar por hacerte estas 5 preguntas:
Los seguros de responsabilidad civil general de tu empresa pueden cubrir algún incidente único y repentino que contamine su entorno, pero pueden dejarte sin protección para el daño ambiental gradual. Una cobertura específica para lo ambiental puede llenar este vacío. Por lo general, esta cobertura se estructura sobre la base de protección para contaminación a largo plazo y contaminación potencial, incluso si es causada por un dueño o arrendatario anterior, así como la defensa de acciones regulatorias asociadas.
Si bien un programa completo de seguros para riesgo medioambiental debiera cubrir todas tus instalaciones, también debieras evaluar dónde están los mayores riesgos. ¿Qué operaciones tienen el potencial de causar algún tipo de daño medioambiental y qué regulaciones locales tienen riesgos asociados con su cumplimiento?
Las obligaciones legales y requerimientos medioambientales varían en todo el mundo, así como los niveles mínimos mandatorios de seguros contra el daño ambiental. Más aún, la incapacidad de cumplir con estos requisitos, en una región, puede tener consecuencias financieras, operacionales y reputaciones en otro lugar. Comprender las reglas locales de operación es crucial para cumplir a nivel global. Asegúrate de que tu asegurador pueda entregarte conocimientos relacionados con un rango geográfico profundo y amplio. Deben incluir especialistas locales en terreno que te ayuden a cumplir con las regulaciones y requerimientos en relación con los seguros pactados.
Es importante conocer el uso histórico de tus sitios e instalaciones, para que puedas identificar la posible contaminación causada por un propietario anterior. Tu programa de gestión de riesgos ambientales debe tener en cuenta el hecho de que tu empresa podría ser considerada responsable de dicha contaminación heredada.
Hoy, la cobertura de noticias 24/7 y las redes sociales pueden amplificar el impacto de los desastres ambientales. Cuando uno de ellos ocurre, tu compañía muchas veces tiene que hacer más que enfrentar el daño ambiental. Por eso, también debes tomar pasos para contener el daño a la reputación de la empresa, incluso cuando el desastre ha sido causado por terceros. Si tu negocio enfrenta riesgos ambientales, debiera prepararse y actualizar regularmente su plan de manejo de crisis. Este debiera incluir pasos para responder a los daños, proteger la reputación de la empresa y asegurar la continuidad del negocio. Evalúa la posibilidad de buscar un asegurador que apoye la planificación de manejo de crisis y las operaciones.
Reducir los daños, minimizar los costos y manejar los reclamos luego de un incidente que acaba de ocurrir es parte de cualquier programa de control de pérdidas relacionadas con el daño ambiental. El paso más importante es evaluar tus operaciones, analizar proyectos específicos y determinar las acciones que pueden reducir el riesgo ambiental. Encuentra una compañía de seguros que te ayude a entender las regulaciones ambientales locales y entregue acceso a ingenieros y otros profesionales que fortalezcan tu habilidad para prevenir el daño ambiental.